(EFE)
Atlanta (EE.UU.), 18 jun .- Las autoridades sanitarias de EE.UU. están en alerta ante la posibilidad de que se produzcan brotes locales de la fiebre chikungunya, de la que hasta ahora solo hay casos "importados", en zonas del país en las que vive el mosquito transmisor.
"En este momento todavía no se han reportado casos de contagio en Estados Unidos, pero estamos observando de cerca la situación y creo que es probable que llegue al país", dijo a Efe Jennifer McQuiston, de los Centros de Control y Prevención de Enfermedades (CDC).
Hasta ayer, 17 de junio, se habían registrado un total de 80 casos de chikungunya en Estados Unidos, todos "importados", salvo 23 casos de contagio local en Puerto Rico.
Florida es el estado con mayor número de casos (34), seguido de o Virginia (6), Connecticut (3), Nueva York (3), Nueva Jersey (2) y Carolina del Norte, Nebraska, Nevada, California, Indiana, Maryland, Minnesota y Nebraska, cada uno con un caso.
El virus es poco conocido en Estados Unidos, donde se registran menos de 30 casos cada año, todos entre personas que han viajado a las zonas donde es común.
De acuerdo con información de los CDC, el virus es común en África, Asia y algunas islas del Pacífico, aunque recientemente su presencia se ha extendido al menos a 19 territorios y países americanos que han afectado a miles de personas.
Los 19 territorios y países del Caribe y del continente americano que se han visto afectados hasta ahora han reportado 165.990 posibles casos de contagio local y 4.576 confirmados, al 17 de junio, de acuerdo con los CDC.
"La enfermedad es transmitida por picadura de mosquito y entre más mosquitos tenga una zona, más posibilidades de contagio hay, por lo que le estamos recomendando a las personas que están viajando a las zonas donde hay que traten de evitar a toda costa las picaduras", aseveró McQuiston, directora del Departamento de Epidemiología y Diagnóstico de Actividad de Enfermedades Infecciosas Zoonóticas de los CDC.
Pese a que los casos reportados hasta ahora en el territorio continental de EE.UU. han sido todos importados, las autoridades se muestran cautelosas ante el impacto que podría causar la enfermedad de expandirse e infectar a la población local de mosquitos Aedes aegypti y Aedes albopictus, que transmiten la chikungunya.
McQuiston señaló que el hecho de que ambos mosquitos puedan encontrarse en varios estados del sureste del país es una señal de alerta para las autoridades sanitarias a todo nivel.
"Los dos mosquitos que pueden potencialmente transmitir la chikingunya existen en el sureste y otras partes de Estados Unidos y por eso la preocupación que hay es que si el virus entra a Estados Unidos podría infectar a esa población local de mosquitos, aunque la respuesta no la sabemos. Podrían ser brotes locales o un contagio más general, pero es muy pronto para saber", indicó.
La experta enfatizó además la necesidad de la prevención a través de prácticas comunes para evitar las picaduras, como utilizar repelente y evitar estar afuera por períodos largos.
"El mensaje de la prevención es siempre parte de la estrategia de los CDC en la que trabajamos con agencias estatales y locales que reducen la población de mosquitos y para ayudar a evitar que el virus se propague, la protección personal de cada uno va a ser también muy importante", dijo.
El virus de la chikungunya, para el que no hay vacuna, provoca fiebre, fatiga y dolor de cabeza y articulaciones, náuseas y erupciones cutáneas, síntomas que generalmente aparecen entre 3 y 7 días después de la picadura y pueden prolongarse hasta tres semanas.